La nieve es una “compañía” poco agradable si nos encontramos con ella en la carretera. La solución más sencilla (y económica) es llevar en el maletero un juego de cadenas textiles o metálicas.
Los neumáticos son un elemento fundamental para que nuestro coche se adhiera al asfalto. Y su importancia crece de forma exponencial si la nieve hace acto de presencia. En estos casos, llevarlos en buen estado no es suficiente, por lo que se hace obligatorio montar unas cadenas. La cuestión es ¿sabrías instalarlas en caso de necesidad? Si no lo tienes claro, no te pierdas este práctico, donde te mostramos como montar unas cadenas metálicas y unas de tela.
1. Cadenas de tela
Son las más fáciles de instalar, solo tardarás 5 minutos con cada rueda, aunque su eficacia es inferior a las cadenas metálicas. También son más caras, las encontrarás a partir de los 100€.
Paso 1: Derecha o izquierda
Las fundas de tela están diseñadas en función de en que lado se monten, por lo que están señaladas como tal: “R” (del inglés “right”, derecha) y “L” (“left”, izquierda). Asimismo, el lado más ancho va orientado al exterior.
Paso 2: Empieza por arriba
En la banda de rodadura de la tela encontrarás una parte abierta, que normalmente incluye un cierre de velcro; esa es la parte inferior de la cadena. Para colocar la cadena textil, comienza por la parte superior de la rueda, procurando que la banda de rodadura coincida con la del neumático.
Paso 3: Mueve el coche
Una vez hayas colocado toda la tela hasta el suelo, mueve el coche hasta que la rueda gire ciento ochenta grados; entonces, termina de encajar el resto de la cadena y asegúrala con el velcro. Desconecta el control de tracción si tu coche lo equipa.
2. Cadenas metálicas
Son las más eficaces y económicas, a partir de 20€, pero su instalación es compleja, más o menos unos 10 minutos cada rueda. Tendrás que extenderlas bien para evitar los enredos. Recuerda elegir las que correspondan tus neumáticos.
Paso 1: Asegura el coche
Antes de iniciar la instalación, busca un lugar llano y asegúrate de que el coche está bien sujeto (freno de mano puesto y una marcha engranada). Imprescindible usar unos guantes (en la caja suele venir un juego). Asegúrate de cuáles son las ruedas motrices de tu coche, ya que es ahí donde debes colocarlas. En los modelos 4x4, hay que instalarlas en el eje delantero.
Paso 2: Extender las cadenas
Extiende las cadenas en el suelo, con el aro de plástico hacia el exterior. Lleva uno de los extremos hacia el interior de la rueda hasta rodearla por completo. Tira de él hasta dejarlo delante de la rueda.
Paso 3: Unir el aro interior
Ahora, coge los dos extremos de la cadena llevándolos a la parte superior de la rueda, donde procederemos a unirlos. Una vez asegurado el aro, tira de las cadenas hacia el exterior; verás como hay una parte de la cadena de diferente color (amarillo en nuestro caso) al resto, que incluye un pequeño gancho en la parte superior. Engancha los dos extremos y ya tendrás la mitad superior asegurada.
Paso 4: Y ahora, abajo
En el extremo derecho de la cadena amarilla quedará un muelle unido a una presilla, de color rojo en las imágenes. En el otro, encontrarás otros eslabones de distinto color (dorado en nuestro caso), en cuyo extremo hay un gancho; pasa la cadena a través de la presilla, aplicando la tensión necesaria para que no haya holguras. Este es el momento para comprobar que la parte de la cadena que cubre la banda de rodadura del neumático esta bien colocada.
Paso 5: Asegúrala… y listo
Traza una diagonal con la cadena restante y asegura el gancho en uno de los eslabones de la parte opuesta. Es importante que esta unión quede bien tensa. Una vez hayas terminado, procede a seguir los mismos pasos con la otra rueda del mismo eje.
Paso 6: Desconecta la electrónica
Si tu coche está equipado con ayuda electrónica a la tracción, debes desconectarla. Si pulsas el botón de desconexión, se iluminará un testigo en el cuadro de instrumentos; de lo contrario, frenará las ruedas en cuanto detecte patinamiento de éstas y las cadenas no podrán cumplir su función.
Por último, una vez hayas avanzado unos cientos de metros, es recomendable detenerse para comprobar el tensado de las cadenas.
3. Otro tipo de cadenas
Además de las anteriormente mencionadas, existe un tercer grupo de cadenas para nieve, las llamadas de montaje rápido. Su ventaja es que ofrece la eficacia de las metálicas con la facilidad de montaje de las textiles; eso sí, previamente debemos llevar instalado un soporte en la llanta. Su principal inconveniente es el precio, que ronda los 300 €. Las más populares son las Spikes Spyder, que cuentan con la gama más amplia.