Madrid se viste de luces para celebrar estas fechas tan especiales en las que las voces de los niños de San Ildefonso, los turrones, los mazapanes y los Reyes Magos nos ayudan a olvidar la monotonía diaria. Si tienes unos días libres, coge el coche y aprovecha para acercarte a la capital. Te damos algunas ideas totalmente navideñas, pero poco empalagosas. Aprovecha para repostar en las dos Estaciones de Servicio AVIA existentes en Madrid.
1. Compra lotería en la puerta del Sol
El kilómetro cero de la capital anda más revolucionado de lo habitual por estas fechas porque todo el mundo quiere tentar a la suerte y cambiar su destino. Puedes comprar un decimito a las míticas loteras de Sol, pero si prefieres ir a Doña Manolita (Calle del Carmen, 22) abrígate bien y ármate de paciencia, porque ser protagonista de la cola más famosa de España (además de la del paro) tiene su precio. ¡Suerte y a por El Gordo!
2. Tómate un buen cocido madrileño
Nada mejor para hacer frente al frío de la capital que degustar una de las joyas de su gastronomía. En pleno centro de la capital, en el restaurante La Bola (calle La Bola, 5), encontrarás uno de los mejores cocidos del mundo. Lo elaboran desde 1870, así que les sale para chuparse los dedos. Tienen un secreto: utilizan carbón de encina y lo cocinan en pucheros de barro individuales. Si quieres ver cómo lo hacen, te dejan entrar en la cocina y hacerte fotos. Genial, ¿verdad?
Después del atracón, para facilitar la digestión, puedes ir a pasear por los alrededores de la plaza de Oriente que está muy cerca. En la zona se encuentran algunos de los edificios más conocidos de Madrid como el Palacio Real y la catedral de La Almudena.
3. Cómete las uvas con “El Rey León”
Si quieres huir del bullicio y del gentío de la Puerta del Sol y disfrutar de un plan alternativo, lo tienes fácil. Compra ya las entradas para ver el famosísimo musical “El Rey León”, ganador de más 70 premios internacionales. Gracias a su sorprendente y colorida puesta en escena, “El Rey León” te transportará el exotismo y al calor de África aunque en las calles las temperaturas sean más propias de la estepa siberiana. La sesión de Nochevieja incluye un kit completísimo con bolsa de cotillón, benjamín de cava y, por supuesto, las uvas.
4. Completa el belén de tu casa
Seguro que tienes alguna figurita rota y otras tantas se te han perdido a lo largo de los años. No te preocupes, porque en el tradicional Mercado de Navidad de la plaza Mayor –se celebra desde 1860– tienes más de 100 casetas en las que elegir todo tipo de adorno navideño: luces, guirnaldas, espumillones… ¡Un auténtico parque temático! Además, podrás comprar dulces típicos de estas fechas: mazapanes, tortas, roscón de reyes, turrones… El ambiente es entrañable, te encantará.
5. Entrega la carta a los Reyes Magos
Pero tampoco te pases pidiéndoles muchas cosas, que no está el horno para bollos… Si vas con niños, no podéis perderos la Cabalgata de Reyes. En resumen: es espectacular. Tus hijos pasarán un rato inolvidable y disfrutarán viendo las fantásticas carrozas de Melchor, Gaspar y Baltasar, así como los distintos y llamativos personajes que protagonizan el recorrido. El prolegómeno perfecto para una noche llena de ilusión.