Si has estado alguna vez en Asturias, te habrás dado cuenta de que muchos de sus habitantes sustituyen la o por la u al final de muchas palabras… Pues en Cudillero, además, tienen su propio idioma: el pixuetu. Te proponemos cinco planes para que conozcas mejor las peculiaridades de una de las villas marineras más bellas de España. Haz un alto en la Estación de Servicio ADENOR CUDILLERO y tira millas.
Plan 1.
Aprende la historia de los “pixuetus”
A los habitantes de Cudillero, en general, les llaman, “pixuetus”, pero, en realidad, sólo son “pixuetus” los pescadores y sus familias. Si quieres saber de sus siglos de tradición marinera y de sus costumbres, pásate por el Aula didáctica “Los Pixuetus y la mar”. Ubicada en la plaza de la Marina, en la antigua lonja de pescados, es el mejor punto de partida para conocerlos. Allí te explicarán que el “pixuetu”es un peculiar dialecto del asturiano que contiene palabras de origen nórdico y que se habla exclusivamente en Cudillero. Curioso, ¿verdad?
Plan 2.
Pasea por el anfiteatro con vistas al mar
Cudillero te va a sorprender por su belleza y por la singularidad de sus laberínticas calles, jalonadas de casitas de colores superpuestas en torno a la plaza del Marina, como si de un anfiteatro se tratara. Disfruta de sus encantos y de sus increíbles vistas al Cantábrico siguiendo la ruta de los miradores.
Plan 3.
Disfruta de increíbles puestas de sol en el cabo Vidio
A menos de 10 kilómetros de Cudillero, en el pueblo de Oviñana, junto al faro del mismo nombre, se encuentra el cabo Vidio. Las vistas de la costa sobre sus acantilados de más de 100 metros de altura son impresionantes y sus puestas de sol, inolvidables.
Plan 4.
Acércate al palacio Selgas, un pequeño Versalles asturiano
A unos dos kilómetros de Cudillero, en la pedanía de El Pito, se ubica el majestuoso conjunto de palacio y jardines que la familia Selgas construyó a finales del XIX y que recuerda a Versalles, salvando las distancias: extensos y cuidadísimos jardines, majestuosos edificios y una completa colección de obras de arte que alberga obras de Goya, Tiziano y El Greco.
Plan 5.
Para niños: granjeros por un día
Darle un biberón a una ovejita, recoger los huevos recién puestos por las gallinas, ver el ordeño de las vacas y probar la leche calentita… Una vista a la granja La Cuesta de Santa Marina os asegurará una tarde súper divertida en familia y unos recuerdos inolvidables para los peques.